Hay veces que no sé, si exprimir el sol Para sentir calor Y dudo que al nacer, llegará a creer Que hoy fuera a morir Intento comprender, él porque de esta decisión Si yo jamás odie Me intento aferrar al valor, Pero no sé fingir Solo quiero vivir. ¿Dónde se vende algo de compasión? Para saciar mi soledad ¿Dónde trafican con sueños de amor? Pues quiero esta angustia dormir Recuerdo el día en que mi libertad No tenia precio ni fin En cambio hoy daba hasta la eternidad Por ver mañana el sol salir Me vengare y todo el mal que me hagas Yo te lo devolveré El hombre nunca fue dueño de Gaia Es justamente al revés Oigo unos pasos, se quiebra mi voz Sé que vienen a por mí Y un sacerdote en nombre de dios Pregunta: ¿quieres confesión? Confieso que amé y creí en Dios De los pobres, justo y moral Confieso que en la silla En la que he de morir Mi alma renacerá Toda mi vida desfila ante mí, Tantos sueños por cumplir No tengas miedo, no llores por mí, Siempre estaré junto a ti. Oigo los rezos, intento gritar, Me cubren para no mirar A los ojos de una cruel humanidad, La muerte se excita, es el fin.
Hay veces que no sé, si exprimir el sol Para sentir calor Y dudo que al nacer, llegará a creer Que hoy fuera a morir Intento comprender, él porque de esta decisión Si yo jamás odie Me intento aferrar al valor, Pero no sé fingir Solo quiero vivir. ¿Dónde se vende algo de compasión? Para saciar mi soledad ¿Dónde trafican con sueños de amor? Pues quiero esta angustia dormir Recuerdo el día en que mi libertad No tenia precio ni fin En cambio hoy daba hasta la eternidad Por ver mañana el sol salir Me vengare y todo el mal que me hagas Yo te lo devolveré El hombre nunca fue dueño de Gaia Es justamente al revés Oigo unos pasos, se quiebra mi voz Sé que vienen a por mí Y un sacerdote en nombre de dios Pregunta: ¿quieres confesión? Confieso que amé y creí en Dios De los pobres, justo y moral Confieso que en la silla En la que he de morir Mi alma renacerá Toda mi vida desfila ante mí, Tantos sueños por cumplir No tengas miedo, no llores por mí, Siempre estaré junto a ti. Oigo los rezos, intento gritar, Me cubren para no mirar A los ojos de una cruel humanidad, La muerte se excita, es el fin.